El 9 de octubre de 1967 era ejecutado Ernesto Che Guevara en el poblado boliviano de La Higuera. Moría así el honesto revolucionario que, siendo aún un estudiante universitario, decidió primero dedicar su vida a enfrentar la pobreza y la explotación y luego, darlo todo en la lucha contra el imperialismo y por construir el socialismo. Con su asesinato también nacía el mito del guerrillero heroico que inspiró la lucha de varias generaciones y aún perdura ya bien entrado el siglo XXI.